Fantasía o realidad, me da igual…

Hace mucho tiempo caminaba descalza a orillas del mar, las olas se desvanecían y la brisa acariciaba mi cara esa tarde de verano de la que nunca me voy a olvidar. Después de haber caminado sin parar, me senté a observar como las olas venían y regresaban al mar, absorta de tanta belleza, me he quedado dormida a orillas del mar, a lo lejos solo pude escuchar el susurro del mar, que con un canto de cuna me ha envuelto en un sueño del que nunca hubiera querido despertar…
Aun semidormida sentí la presencia de alguien que me miraba, y al abrir los ojos la silueta de un anciano pude divisar, recuerdo su barba blanca sus ojos claros como el agua del mar, su rostro y manos reflejaban aquellas arrugas que los años dejan al pasar. Me he asustado un poco pero al verle en silencio, me trasmitió paz y tranquilidad y con un hola a secas le he saludado y sonreí con más tranquilidad. Sin pronunciar palabras me ha señalado el sol a punto de entrar al mar, era el cuadro perfecto, y con voz baja he dicho: simplemente bello…
Con una sonrisa en el rostro, me miro a los ojos y dijo: simplemente bello? cielo esto no tiene precio, metió su mano al bolsillo y ha sacado su pipa y regresando la mirada me pregunto: te importa? No porque ha de importarme le respondí…
Mientras fumaba su pipa, saco del bolsillo una concha de mar, era hermosa, el color era imposible de descifrar, era la concha de mar más bella, recuerdo que no paraba de mirar, lentamente dirigí la mirada hacia él, el humo de su pipa a penas dejaba ver su rostro, y buscando un poco de aire alce la mirada al cielo, las estrellas brillaban con más intensidad y la luna sola en medio de aquel manto lleno de oscuridad.
Que miras pregunto? La luna y las estrellas respondí, y con una sonrisa mágica dijo:
Hace mucho tiempo existieron dos reinos, el reino del cielo y el reino del mar, un día en el cielo se oyeron las trompetas y cantos de felicidad por fin había nacido el heredero, era un niño lleno de vida, su belleza deslumbraba en todo lugar, mientras festejaban en los cielos, a orillas del mar nacía una niña hermosa, la felicidad era inmensa para todos los que habitaban el mar, su heredera había nacido en tiempos de oscuridad…
Como en todos los reinos siempre existió la rivalidad, los dos reinos eran enemigos y mantenía un pacto, un pacto que pronto acabaría con tanta maldad… Continuará