Cuando se trata de vivir se podría decir que vivo al máximo
sin importar hacia donde me dirija, simplemente trato de vivir cada día de mi vida como si fuese el último
día… la vida es un juego del que muchos suelen ser esclavos, viven el día a día
haciendo cosas que no les gusta hacer, preocupándose del que dirán, viviendo de
preocupaciones, privándose de muchas cosas que son valiosas en esta vida.
Cansada de la rutina de la ciudad, decidí aventurarme en el
campo, hace un mes que estoy viviendo en
una casa lejos del bullicio de la ciudad, rodeada de árboles, animales y
escasas personas. Es increíble como todo es tan distinto a lo que solía
conocer, la vida aquí es mas tranquila
sin preocupaciones y por si fuera poco todo
aquello que solía ser escaso en la ciudad aquí abunda…
Todas las mañanas me despierto con un concierto de aves que
cantan desde mi ventana sin parar, los árboles suelen mecerse con tranquilidad,
y el aire que respiro es puro como el agua del manantial, veo el horizonte y puedo observar el mejor
protector de pantalla que ni en google se pueda encontrar.
Por las noches la luna suele ser el foco más grande de este
lugar, los grillos cantan sin parar y la estrellas brillan con mayor intensidad, alguna veces puedo escuchar como el viento
azota a los árboles con brutalidad, haciéndolos
sonar como las olas del mar…
La noción del tiempo se va,
los días pasan desapercibidos, los sonidos de la naturaleza te inundan los sentidos y respirar es más puro que todo el humo de la ciudad. A mi
criterio los atardeceres son mis favoritos, el cielo se torna de diversas
tonalidades haciendo un espectáculo inolvidable difícil de comprar…
Los niños persiguen mariposas, juegan a la pelota o se suben
a los árboles, andan descalzos en la calle, solo se preocupan por comer, dormir
y jugar. Veo caballos, gallinas, patos, pollos, cerdos y más de alguna ave
espectacular, panales de abejas y hormigas que pican si te descuidas o te paras
en un mal lugar. Diversidad de árboles esconden la casa donde suelo pasar l
mayor parte del tiempo, sus diversas tonalidades
de verde son imposibles de encontrar en un catalogo de pintura o en la web
donde todos solemos buscar, sus hojas caen con el viento, los insectos abundan
y las arañas ni hablar, cucarachas gigantes y grillos que saltan sin parar todo sin duda es hermoso aunque debo confesar
que por las noches me da miedo de que me pique algún insecto y mas si es un alacrán…
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