¿Se puede vivir sin amor? Estoy segura de que sí, cuando el amor deja de ser una necesidad y se convierte en algo más. Muchas personas pensarán que estoy loca, a lo mejor y si lo estoy, pero cuando tus prioridades cambian el amor pasa a segundo plano. Claro, todo es más fácil cuando la otra parte está de acuerdo a concretar este plan malévolo.
Renunciar al amor no ha sido malo después de todo, al contrario me ha abierto los ojos y me he dado cuenta que sólo he renunciado a una parte de él, estoy completamente segura que existen tantas clases de amor que decirle No, a una de ellas no me hará menos humana. Así que estoy conforme con mi decisión.
Cuando se trata de amor las personas se limitan, creen que el amor debe ser cuadrado, así tal cual, como nos hicieron creer que debía de ser. Honestamente el amor no es como lo pintan, el amor no tiene limites, siempre he creido que el amor trasmuta, es por eso que cuando dejemos esas viejas creencias que nos implantaron, nos daremos cuenta de la inmensa capacidad que tenemos para amar.
Estoy consiente que el amor es el motor de nuestras vidas, pero también estoy consiente que puedo sentir amor de mil maneras, una canción, un recuerdo, una película, un buen libro, una obra de arte. Hay tantas maneras de sentir amor que renunciar a una de ellas no me hará daño.
Y si en algún momento de mi vida quiero sentir de nuevo lo que es el amor, basta con mirar el cielo y pensar que en algún lugar del universo hay alguien que me ama tal y como Soy.